22 feb 2016

Viaje a Tailandia: Ayutthaya

¡Hola!

    Continúo con mi viaje por Tailandia :)

    El segundo día fuimos a Ayutthaya, una ciudad situada a casi 80 km de Bangkok y que yo había visto por internet y tenía ganas de visitar.

    Para ir a Ayutthaya cogimos un minibús, ya que era la opción más rápida (sólo una hora de trayecto). Para ello, fuimos a 'Victory monument', una rotonda de Bangkok donde puedes coger uno de estos vehículos para visitar otras ciudades tailandesas.


Victory monument
Los minibús salen desde aquí

    En el viaje coincidimos con un matrimonio joven de Menorca y los cuatro decidimos alquilar juntos un tuk-tuk para pasear por Ayutthaya.

Nuestro tuk-tuk
    
    Os cuento un poco de historia sobre Ayutthaya mientras os enseño algunas de las fotos que hice, ¿vale?


Wat Yai Chai Mongkol

    Ayutthaya fue fundada en el año 1350, convirtiéndose en la capital del reino de Siam.


Vistas desde Wat Yai Chai Mognkol
    
    Durante el siglo XVII fue un importante puerto internacional con una gran actividad comercial, debido en gran parte a su localización a medio camino entre China, India y Malasia. Barcos europeos, japoneses y chinos utilizaban Ayutthaya como puerto para comerciar madera de teca, marfil, pieles, seda y toda clase de artesanía. Además, la ciudad permitía a los comerciantes extranjeros, ya fueran chinos, indios, japoneses o persas y, posteriormente, portugueses, españoles, holandeses, británicos y franceses, establecerse fuera de los muros de la ciudad.



    Asimismo, durante el siglo XVII tuvo muy buena relación con la corte del rey Luis XIV de Francia, cuyos embajadores comparaban la ciudad en tamaño y riqueza con París.



    Se estima que sobre el año 1600 la población llegaba a los 300.000 habitantes, aumentando casi a un millón alrededor del año 1700. De hecho, era una de las ciudades más pobladas del mundo en esa época. En su máximo esplendor, Ayutthaya contó con más de 1500 templos y 4000 estatuas.


    En 1765, el ejército birmano invadió Ayutthaya y la capital fue sitiada durante 14 meses. Finalmente, los birmanos quemaron la ciudad, provocando así la pérdida de innumerables obras de arte, de sus bibliotecas, y dejando la ciudad en ruinas.




Budas destrozados por el ejército birmano

    Estas ruinas forman ahora el parque histórico de Ayutthaya. En su lado este, fue fundada la actual ciudad de Ayutthaya.



    
    El conductor de nuestro tuk-tuk nos tuvo unas cuatro horas enseñando las diferentes partes de este parque histórico.



    Una de las zonas que visitamos fue Wat Mahathat, en la que se encuentra la famosa cabeza de un Buda incrustada en un árbol.


Parecemos dos retacos en esta foto, pero es para que veáis bien la cabeza

    No se sabe cómo pasó, algunos hablan de "milagro"; pero la historia cuenta que la cabeza pertenecía a uno de los Budas que el ejército birmano decapitó. Esta cabeza cayó a la tierra y un árbol comenzó a crecer debajo de esta, provocando que la cabeza acabara quedándose atrapada entre sus raíces.


Es uno de los puntos más turísticos de Ayutthaya

    En algunas zonas de este templo era patente el daño que hicieron los birmanos, como en esta "plaza" en la que todos los Budas están destrozados.


El Buda central está reconstruido

    Wat Mahathat fue uno de los monasterios más importantes del reino y era también la residencia del líder de los monjes budistas.


    El conductor del tuk-tuk también nos llevó a Wat Lokayasutharam, donde descansa un Buda gigante de 37 metros de largo.


    Nada más llegar, una señora se nos acercó a vendernos flores para que se las ofrecieramos al Buda. Era una señora de unos 60 años, delgada y menuda, y la verdad es que a mí me dio mucha penilla. No sé si es que me hago mayor y ser más empática va unido a eso, pero últimamente me da por mirar a la gente de mi alrededor y preguntarme cómo será su vida, si serán felices, a qué tienen que hacer frente cada día... y ver a esa mujercilla ir incansablemente detrás de cada turista, sonriendo, intentando que le compren flores, no sé... 

     
    En momentos así me gustaría poder hablar con esa persona y que me cuente cómo es su vida. También puede ser que a la vejez me estoy volviendo más cotilla.


    Posteriormente, fuimos a Wat Chaiwatthanaram, lugar donde me hice la foto que más me gustó de todo el día ^^:

esta (L)

    La hice con el método del "piedra-selfie", que consiste en apoyar el móvil en una piedra y salir corriendo antes de que se haga la foto.

    Como se ve más o menos en la foto anterior, el templo tiene una torre central de 35 metros, de estilo camboyano, con cuatro pequeñas pagodas. Esta plataforma central está rodeada por ocho pagodas más. Toda la construcción se alza sobre una plataforma rectangular.


    El templo fue construido en 1630 por el rey Prasat Thong, en recuerdo de su madre - residente en esa zona -, y fue también el primer templo de su reinado.

Monjes budistas pasean por el templo

    Su nombre tailandés significa 'El templo del largo y glorioso reinado'.


    Después, visitamos brevemente el Wat Ratchaburana. Fue construido en 1424 por el rey Borommarachathirat II con el fin de enterrar allí a sus dos hermanos mayores. Ambos, sobre elefantes, se habían enfrentado en una batalla para conseguir el trono. En dicha batalla fallecieron los dos.


    Una de las últimas visitas fue el Wihan Phra Mongkhon Bophit. Este edificio quedó completamente en ruinas tras el asalto del ejército birmano, pero fue restaurando en el año 1956.

Mirad qué asientos más cuquis

Una cabeza de Buda situada en el interior
    Aquí, un grupo de estudiantes de instituto se nos acercó para ofrecernos una sopa fría que ellas mismas estaban preparando. Llevaba harina de arroz, leche de coco y azúcar, por lo que era súper dulce.

La sopa

No pude resistirme a hacerme una foto con las chicas
    
    Por último, visitamos el Wat Phra Si Sanphet. Este fue el templo más sagrado de su época y estaba ubicado en el viejo palacio real. 


    Al ser el templo de la familia real, allí no vivían monjes budistas; se usaba exclusivamente para ceremonias de la realeza.

    
    Cuando terminó la visita, el conductor nos dejó cerca de donde se cogía el minibús para Bangkok y nos volvimos a la capital. 

    Aparte de que cenamos en un mexicano, esa noche no hicimos mucho más porque estábamos cansadísimos de todo el día. En la próxima entrada, os cuento qué tal nuestro tercer día por Tailandia.

    ¡Muchos besitos y gracias por leerme!


17 feb 2016

Viaje a Tailandia: Bangkok I

¡Hola!

    Como ya comenté muy por encima en la entrada anterior, después de volver de Tianjin estuvimos dos días en Rizhao ¡y nos fuimos a Tailandia!

    Por una nueva ley que se ve que han sacado hace poco, para que David pudiera estar el máximo en China como turista (dos meses, antes eran tres), a los 30 días tenía que salir del país y volver a entrar para que le concedieran otro permiso de 30 días.

    En diciembre, estuvimos pensando a qué país ir. Yo tenía muchísimas ganas de ir a Japón. De hecho, es uno de los sueños de mi vida desde que tenía diez años más o menos. El problema es que ya me habían avisado de que a finales de enero haría muchísimo frío en Tokio y que no disfrutaría tanto el viaje; y justo una compañera tailandesa que está de intercambio me había dicho que podía ir a su universidad en Bangkok y que incluso podía presentarme a la decana para que blablabla (para que nada, porque al final fui a su país y me dejó tirada ¬¬).

    En fin, que como creí que en Bangkok podía tener una posible oferta laboral y pensé que una semana de calorcito en pleno enero me iba a venir bien, decidí que Tailandia fuera el país que íbamos a visitar. 

    El avión salía desde Qingdao y, por culpa de una súper ola de frío que había dejado las carreteras heladas, muchos de los caminos estaban cortados y tuvimos que liar la de San Quintín para poder llegar. Afortunadamente, una chica de la estación de autobús de Rizhao sabía inglés y nos explicó qué autobuses teníamos que coger. Al final, para un trayecto de dos horas tardamos casi cinco, pero llegamos.

    Llegamos y una temperatura de -16º nos esperaba. Mi idea era ver un poco de Qingdao ese día, pero entre el desastre autobusero y el frío que hacía, llegamos al hotel a las 9 de la noche y de ahí no nos movimos.

    Os enseño el vídeo que le envié a mi madre desde el aeropuerto de Qingdao la mañana siguiente, para que veáis qué frío:


   
    De esos -16º pasamos a casi 28º cuando llegamos a Bangkok sobre las 5.30 de la tarde. Íbamos a estar casi cuatro días y nos quedábamos en un hotel llamado 'Baan K Residence'. Ha sido lo más parecido a tener nuestra propia casa en la capital tailandesa, porque las habitaciones consistían en pequeños apartamentos con salón, cocina y, por supuesto, cuarto de baño y dormitorio. Las cuatro noches nos salieron por 280€ con desayuno incluido.


El desayuno lo hacíamos en una especie de porche

    Se suponía que en Bangkok me encontraría con mi compañera, por eso nos quedamos cuatro días. En teoría, un día entero lo íbamos a pasar con ella viendo la isla de Ko Kret (al norte de Bangkok), su universidad y un instituto donde ella trabajó. Pero al final no pudo ser.

    El día que llegamos, como no teníamos nada planificado, cogimos el metro y nos bajamos en la estación más cercana al centro de Bangkok. Comenzamos a andar sin rumbo fijo y lo más gracioso es que nos topamos de lleno con el barrio chino. ¿En serio?, ¿salgo de China y lo primero que me encuentro es un barrio chino? xd.


Visitar un nuevo país y sentirme como en casa
    Pasamos por delante de Wat Traimit, que a esas horas estaba cerrado (os cuento un poco de este templo más adelante), 



y paseamos por lo que parecía una larga avenida china llena de puestecillos de comida y negocios pequeños.



    Como teníamos hambre - y no queríamos comer comida china porque nos parecía el colmo - compramos lo que el mismo vendedor nos vendió como "crepes tailandeses", una especie de empanada rellena de carne, en el caso de David, y de fruta, en mi caso.


El puesto de los 'crepes'

    A la mañana siguiente, volvimos a Wat Traimit.


Fachada principal con una imagen del rey

    Yo tenía ganas de ir a este templo porque había leído que albergaba en su interior el Buda de oro más grande del mundo.


Alrededores de Wat Traimit (su escalera principal se ve arriba a la derecha)

    Es un Buda de oro macizo que pesa 5,5 toneladas y mide tres metros.


Un monje budista "bendice" a una chica - el Buda del fondo no es el famoso de oro -

    Lo más interesante de este Buda es su historia, que os voy a copiar tal cual de Wikipedia:

    "A principios de 1930, unos trabajos de acondicionamiento de las orillas del río Chao Phraya, cerca del barrio chino de Bangkok, requirieron la destrucción de un viejo templo abandonado que contenía una estatua de Buda en estuco dorado" - estuco = masa de yeso blanco y agua de cola -.


David en las escaleras del templo

    "Como era impensable destruir la estatua, a pesar de su aspecto poco atractivo, se decidió trasladarla a Wat Traimit, una pagoda de poca relevancia [...] que estaba en el barrio chino.

    El templo no tenía edificio apto para almacenarla, así que la estatua estuvo 20 años en el exterior, bajo un simple techo de chapa.

    En 1955 debía construirse un nuevo edificio y los monjes decidieron instalar allí la estatua. Una grúa tenía que desplazarla con precaución pero, desafortunadamente, cedió un cable y la estatua cayó en el barro. Este mal presagio asustó a todo el mundo y, después de una fuga multitudinaria, la estatua quedó abandonada en el suelo. Era la estación de las lluvias y, como para dar la razón a los malos presagios, una formidable tormenta se desencadenó toda la noche, anegando la ciudad bajo trombas de agua.

    Al alba, el superior de la pagoda volvió, a pesar de todo, a evaluar los daños y empezó a quitar los restos de barro de la estatua, observando que el estuco mojado estaba agrietado y dejaba ver un metal brillante. 

    Tras algunas indagaciones, se apercibió que, bajo el estuco, la estatua era de oro macizo. Esta noticia dio la vuelta a la ciudad, asegurando al templo una fama, una riqueza y un incremento en las visitas nunca más disminuida."


¡Este sí es el Buda de oro!

    "Se supone que la estatua, procedente de Ayutthaya, fue disimulada bajo una capa de yeso para sustraerla de la codicia de los birmanos, que asediaban la ciudad. Más tarde, transportada a Bangkok, se perdió su recuerdo, permaneciendo sepultada en el olvido durante casi 200 años".



    ¿A qué mola la historia? Pues ya la conocéis vosotros también :D.

    Después de Wat Traimit, estuvimos callejeando unas tres horas por Bangkok.  Yo estoy súper en contra de planificar paso por paso los viajes; prefiero saberme más o menos lo que hay que ver en la ciudad y hacerme una idea de dónde está cada cosa en mi cabeza, e ir callejeando y descubriendo rincones.

    El problema en Bangkok - o al menos el que tuvimos nosotros - es que parece que llevas en la frente colgado el letrero de "turista" y de vez en cuando te aparece un tailandés a dar por c molestarte. 

    El ritual más o menos es el mismo. Se acercan, te saludan amablemente, te preguntan si necesitas ayuda y, aunque digas que no, te informan de que justo esa calle por la que vas a pasar está cerrada porque X (te dan varios motivos, la policía lo ha cerrado, es el día del Buda, está en obras...), así que ellos, súper serviciales pero muy insistentes también, te pedirán que vayas con ellos por otro lado.

    Y, bueno, que te lo hagan una vez, no pasa nada, pero que cada 20 metros te aparezca alguien para decirte exactamente lo mismo... No sé, los días que estuve en Bangkok me sentí como una turista en todo momento. No disfruté al 100% de la ciudad porque nos trataron como si fuéramos cajeros automáticos a los que hay que sacar dinero. 

    Volviendo al callejeo, fue un poco mierda porque, aparte de los pesados, el mapa que se bajó David resultó ser una porquería y nos perdimos un par de veces V_V.


Una de las calles que no supimos encontrar en el mapa

    Imaginaros cómo fue el paseo que lo único bueno de la mañana fue un puestecillo que nos encontramos donde una señora vendía pan de molde con mantequilla y leche condensada que estaba muy rico:




   Al mediodía, la cosa empezó a mejorar - menos mal - porque nos encontramos con un par de templos.



    Nos topamos con 'el gran columpio' y con el templo Wat Suthat.

    El gran columpio es una estructura de 20 metros de altura que se llegó a usar como un columpio de verdad en una ceremonia anual brahmánica en la que los hombres que participaban tenían que intentar coger una bolsa con monedas sujetada a uno de los pilares.

    Esta práctica dejó de hacerse a partir de 1935 a causa de los accidentes (muchos de ellos mortales) que pasaban cada año.


El columpio sin columpio

    Por su parte, el templo Wat Suthat me encantó. Es un templo muy tranquilo, sin turistas, donde muchísimos tailandeses rezaban.



    Hice varios videos de este lugar, pero no puedo subirlos porque algunos llegan casi al minuto y pesan mucho. Por suerte, este si os lo puedo enseñar - vais a tener que doblar el cuello, que se ha subido doblado -:



    Me gustó tanto el ambiente tan religioso que se respiraba que, tanto David como yo, nos contagiamos y dimos gracias y pedimos junto a otros tailandeses que se encontraban allí.


Puedes elegir lo que quieras de estas mesas y metes tu donativo en las urnas
Las flores puedes colocarlas en este altar
David enciende el incienso con una señora

Yo elegí estas flores
    Cuando entramos al templo, un sentimiento muy parecido al síndrome de Stendhal me invadió y hasta se me saltaron las lágrimas de lo que estaba viviendo. Sé que contado queda muy exagerado, pero la imagen de tantas personas orando a la misma vez me cautivó.




    
    Os dejo uno de los videos para que lo podáis ver:




    La verdad es que una se siente un poco mal como turista "invadiendo" esta reunión tan íntima. Ellos se encuentran leyendo en plena oración y la señora británica ahí está paseando como si de un museo se tratara y ahí también estoy yo en medio dando vueltas con mi móvil.


Una chica usa su i-phone como pisapapeles

    Como curiosidad, en este templo hay 156 budas (están fuera, se ve en el primer video) y 28 pagodas chinas ,que representan las 28 vidas de Buda.


Aquí podéis ver algunas de las pagodas

    Después de este templo, aparecimos en el 'Monumento a la democracia" y comimos por esa zona.



Mira que la comida china pica, pero la tailandesa no tiene nada que envidiarle

    Seguimos con nuestro paseo con intención de llegar a la zona del palacio real.
Una señora parece ser que le adivina el futuro a una de esas dos chicas

Un 'tuk-tuk' (el nombre de ese vehículo) a la espera de llevar a algún turista
    
    Entramos antes en un pequeño templo situado justo en frente y he estado buscando su nombre por internet y no lo he encontrado, así que no os puedo decir cómo se llama :(



    Dentro vi un "espectáculo" un poco raro del que hice un video. Juzgad vosotros mismos:

    a mí me encanta la señora del fondo como no sabe qué hacer y se pone a tocar el árbol como para disimular xD

Una chica reza en el interior del templo

    Como ya no nos daba tiempo visitar el palacio real, decidimos ir a Wat Pho, que estaba justo al lado.




    El nombre oficial de este templo es Wat Phra Chetuphon Vimolmangklararm Raiwaramahaviharn - tenéis que leerlo en voz alta que, si no, no tiene gracia - y está situado en una superficie de 80.937 metros. 


    Además, cuenta con más de 90 estupas.

Esto son estupas

    Este templo es famoso por su Buda reclinado.


    Este Buda mide 46 metros de largo y 15 de alto. Está construido en ladrillo y estuco, aunque está bañado en oro. Es la estatua del Buda reclinado más grande de Tailandia.


He señalado en rojo a una señora para que comparéis el tamaño de la estatua con el de una persona
    Cuando nosotros estuvimos estaban restaurándole los pies, así que no pudimos verlos.


    Según he leído, sus pies miden cinco metros de largo y tres de ancho y están decorado con 108 símbolos.

Muchos turistas también habían ido a última hora, como nosotros

    En ver todo el complejo tardamos unas dos horas. Es grandísimo e hice un millón de fotos; no os podéis imaginar el ratazo que he pasado para seleccionar qué fotos poner.


    Dentro de este templo había más imágenes de Buda y personas sentadas frente a él, la mayoría turistas:


    Con esta visita termina ya mi entrada de hoy, que creo que habéis tenido bastante Bangkok por el momento 

Vale, esta es la última foto

    Os dejo con un video que hice sobre el enganchamiento tan bestia que tienen con el móvil. Quizás en España ya estamos igual - espero que no - pero llama la atención que de 17 personas, 13 estén consultando el móvil (no nos he contado ni a mí, ni a David). De hecho, vimos varios carteles pidiendo a la población que dejen de mirar el móvil y que socialicen más. 


    En fin, ya si os dejo. ¡Muchos besos!